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Registro de días libres

Alistamiento de esclavos en la ciudad de Gurabad.
Por orden de Parvezravan, Espíritu de la Victoria, y por la gracia de al-Ahmar, pudimos establecer aquí un campamento para poder ofrecer un lugar de descanso a un total de 500 hombres dignos de mérito.

A los esclavos se les deberá proporcionar una vestimenta y alimentación adecuadas. Además, con el fin de impedir cualquier revuelta, es importante que tengan acceso a entretenimiento diario.
Deberá garantizarse la disponibilidad de esclavos luchadores, soldados y médicos para afrontar cualquier imprevisto.
Deberá asegurarse que los sitios de obra dispongan de tiendas, dormitorios, enfermerías, tabernas, cementerios y espectáculos de combate gratuitos una vez cada siete días como privilegio para los esclavos.
Deberá permitirse a los esclavos adinerados que contraten a campesinos para ayudarles en sus tareas o que adquieran sus propios esclavos. No obstante, si estos interfieren en el orden o retrasan el progreso de las obras de construcción, los esclavos de esclavos serán ejecutados y se castigará por duplicado a sus propietarios.
La paga de los esclavos se abonará en plata, y los supervisores serán los encargados de repartirla según los distintos rangos a los que pertenezcan los esclavos.

Se enviará a los más fuertes a construir los cimientos del jardín.
Se enviará a los más habilidosos a tallar motivos decorativos en la base donde se sostendrán los pilares.
Se enviará a los más inteligentes a acondicionar las instalaciones para los visitantes que están por llegar.
Se enviará a los más meticulosos a elaborar las exquisiteces con las que se deleitarán los futuros visitantes.
Se enviará al resto de esclavos a picar las rocosas montañas para obtener piedra, a talar árboles para obtener troncos de madera y a condensar toda su fuerza en la construcción de la cúpula.
No debería llevar más de doscientos días desde la primera palada de tierra hasta la plantación de la última flor.

Que quede grabada la causa de esta negligencia.
Para que las generaciones futuras sepan de esta inaceptable conducta.
Y para que hasta el más indolente se mantenga alerta y pida más trabajo a voz en grito.

Día 1
El sabio llamado Nefumat declamó que su morada estaba ardiendo en llamas por algún motivo, y que no se veía en condiciones de continuar compartiendo su sabiduría. Se tomó un día libre.

Día 7
Tres personas sufrieron una insolación, por lo que se tomaron un día libre.

Día 10
El sabio llamado Nefumat declamó que se había olvidado de cerrar las ventanas de su morada, que la arena se había acumulado hasta alcanzar la altura de sus tobillos y que no se veía en condiciones de continuar compartiendo su sabiduría. Se tomó un día libre.

Día 14
Cuatro personas se atragantaron tras respirar grandes cantidades de arena. Se tomaron un día libre.

Día 18
El sabio llamado Nefumat declamó que se había comido por error un pan de hace quinientos días, que sentía malestar de estómago y que no se veía en condiciones de continuar compartiendo su sabiduría. Se tomó un día libre.

Día 21
Diez personas sufrieron insolación. Se tomaron un día libre.

Día 25
El sabio llamado Nefumat volvió a declamar que, debido al calor abrasador que hacía por las noches, era incapaz de conciliar el sueño y se sentía agotado. Se tomó un día libre.
El presunto sabio Nefumat era perfectamente capaz de compartir su sabiduría en todas las situaciones anteriormente expuestas, mas no se mostraba dispuesto a hacerlo. Si vuelve a cometer una ofensa semejante ante los ojos de al-Ahmar, será expulsado de Gurabad.

Día 26
Nefumat huyó.

Día 27
Cuatro personas fueron aplastadas por una roca. Esto seguramente sucedió porque algún mentecato provocó la furia de al-Ahmar con su insolencia.
Las adivinaciones predijeron terribles augurios. Las obras se detuvieron de inmediato.