“Este es el símbolo del pacto, y también es el desafío que te propongo”. “Toda mi sabiduría está contenida en este candado”. Recordó la primera vez que había visto a la joven de amplias mangas, quien con expresión solemne y emocionada le mostraba el símbolo. ¡Qué estupidez! Estaba claro que no había ningún contrato oficial y que simplemente iban juntos, pero de forma independiente. Pero, aun así, recordaba la escena en la que se encontraron por primera vez, los lirios de cristal floridos en el campo, y al final, cuando ella habló entre las flores. “Esas personas insignificantes que son tan pequeñas y frágiles como motas de polvo...” “Como son insignificantes, no saben si morirán a causa de desastres naturales o provocados, y siempre tienen miedo”. “El miedo hace que se esfuercen y que quieran ser más inteligentes. Es comprensible”. “Como tú eres mucho más fuerte que yo, debo utilizar mis habilidades y mi sabiduría”. “Con tu fuerza y mi cerebro... esta ciudad sería increíble”. Al final, sonrió tristemente y se convirtió, muy despacio, en una mota de polvo. “Parece que no puedo seguir caminando contigo. ¡Olvida el asunto del candado!”. “Este es el símbolo del pacto, y también es el desafío que te propongo”. “Toda mi sabiduría está contenida en este candado”. “Si la liberaras...” En todos estos años, no había sido capaz de acceder a la sabiduría contenida en el candado, ni sabía cómo terminaría aquella frase. Con el paso del tiempo, los lirios de cristal salvajes casi habían desaparecido.